CONSECUENCIAS DE LA PANDEMIA
Siempre pendientes de la actualidad y de cómo va cambiando nuestra vida cotidiana desde que el COVID-19 se instauró entre nosotros, no podíamos dejar pasar ni un día más sin hablaros de la boca de mascarilla.
Y es que desde la Clínica Dental Mª José Crespo vemos cada vez en más pacientes este problema.
Ya llevamos meses usando a diario las mascarillas, que si bien, son totalmente necesarias para proteger a los demás y protegernos a nosotros mismos, por contra, están desarrollando una serie de cambios en nuestros comportamientos.
Uno de los problemas más comunes, que afecta a casi todo el mundo, es el hecho de la ansiedad que generan. De ahí que, sin ser conscientes, muchos de vosotros apretéis constantemente la mandíbula lo que acarrea molestias en esa zona que pueden irradiarse hacia cabeza, oído o cervicales.
Seguramente te hayas dado cuenta de que además nuestra alimentación también se ha visto afectada. Desde la Clínica nos estamos percatando de que muchos de nuestros pacientes han incorporado más azúcares en su día a día. Realizando además, varias picadas al día que antes no hacían. Como ya sabréis esto afecta y mucho a la salud de nuestros dientes.

Al usar mascarilla cubrimos boca y nariz y sin darnos cuenta estamos usando menos el conducto habitual para la respiración. Al hacerlo por la boca generamos una mayor sequedad en la zona ya que creamos una cantidad menor de saliva. Y como ya sabéis la saliva es esencial para proteger la dentadura y las encías de las bacterias que habitan en la boca. Sin ella, estamos expuestos a problemas como el mal aliento, enfermedades de las encías e incluso caries dental.
Pero no os preocupéis porque detectado el problema es mucho más fácil poder adaptarnos a las nuevas circunstancias y encontrar las soluciones

¿Qué recomendamos?
Desde la Clínia Dental Mª José Crespo os recomendamos encarecidamente beber agua con frecuencia y evitar bebidas azucaradas así como el picoteo para mantener neutro el pH de tu boca y unos niveles óptimos de saliva que la protejan.
Otra recomendación muy sencilla de realizar es que después de bebidas como el café, nos tomemos seguidamente un vaso de agua para arrastrar cualquier posibilidad de caries, mal aliento o manchas antes de que arraiguen en tu boca.
Usar hilo dental varias veces al día o siempre que os sea posible.
Comprar una pasta de dientes fluorada de buena calidad, enjuague dental y un buen cepillo
Y aunque este consejo ya lo habréis oído por activa y pasiva os repetimos que llevar la mascarilla siempre limpia es crucial para evitar que proliferen las bacterias. Lava tu mascarilla cada día y ten siempre a mano una limpia.
Ya sabes que tu boca es el punto de entrada a tus vías respiratorias y digestivas, y algunas de estas bacterias pueden causar enfermedades. Así, tu salud oral es tu salud general y hay que visitar al dentista.
Y es que la mascarilla no es un parche, por eso te animamos a que acudas a tus revisiones previstas!
Si tienes cualquier duda o consulta no dudes en trasladárnosla, ¡estaremos encantados de ayudarte en lo que sea!